Ventajas de las Metodologías Scrum y Agile para tu empresa.
Lo más importante para una empresa es su capital humano y cuidarle y darle todas las herramientas necesarias para que sea lo más eficiente posible debería ser la prioridad de todas las empresas. Por eso mismo, hemos decidido dedicar este post a las Metodologías Agile y Scrum, unas técnicas cada vez más implantadas en España y que permiten que los equipos de trabajo sean más eficientes, flexibles y productivos. Veamos a qué nos referimos cuando hablamos de la Metodología Agile y del Scrum.
¿Qué es la Metodología Agile y Scrum?
Con “Agile” nos referimos a las metodologías ágiles que sirven para gestionar proyectos con un enfoque incremental e iterativo. Se trata de adaptarse a los cambios haciendo que según avanza el proyecto, el producto se vaya desarrollando, poco a poco, y presentándose al cliente en cortos periodos (llamados “sprints”), sin adelantarse en la producción. Con esto, se consigue una mayor flexibilidad ante posibles cambios tanto del cliente como del entorno. Es perfecto para proyectos de IT aunque cada vez se utiliza más en otros sectores.
En cuanto a Scrum, es un proceso en el que se trabaja de manera colaborativa, en equipo, aplicando buenas prácticas regularmente y realizando presentaciones parciales del producto final al cliente. Se suele utilizar para proyectos complejos, en los que hay muchos cambios y no están bien definidos desde el inicio, y para resolver situaciones límite (retraso en la entrega, costes demasiado elevados...).
¿Cuáles son las ventajas de la Metodología Agile y Scrum?
1. Metodología Agile
Utilizada para transformar a las empresas, permite:
- Dar mayor relevancia a las personas y a los equipos de trabajo: lo que permite que estén más motivados, se sientan valorados y, por lo tanto, trabajen de una manera eficiente por conseguir buenos resultados.
- Minimizar los riesgos: ya que se hacen revisiones continuamente, es posible adaptarse rápidamente a cualquier cambio que pueda surgir.
- Dar mayor responsabilidad a los empleados: al ser un trabajo colaborativo en el que todos tienen que trabajar por un mismo objetivo permite que los equipos sean más autónomos, que haya una mejor comunicación y que sean más productivos, facilitando también la toma de decisiones.
- Satisfacer al cliente: ya que al cliente se le informa constantemente de los avances y, por lo tanto, forma parte de todo el proceso.
- Responder rápido: permite que los equipos sean flexibles y que puedan responder rápidamente a cualquier cambio del entorno o del cliente. De esta forma, son más competitivos.
- Incrementar el valor añadido y avanzar resultados: ya que el cliente participa en el proceso, se consigue un valor diferencial y que no haya ningún problema con sus expectativas.
2. Metodología Scrum
Ya que es un proceso basado en la división del trabajo en fases con objetivos y tareas específicos (iteraciones), te permite:
- Cumplir con mayor eficiencia con las expectativas del cliente: ya que participa en todas las etapas del proceso, dando su opinión.
- Anticipar resultados: dado que se sacan resultados de todas las etapas del proceso.
- Ser más flexible y adaptarse con más facilidad a los cambios: ya que se revisa en cada etapa del proceso.
- Gestionar en tiempo real los riesgos: según aparecen se pueden gestionar dado que se tiene un gran control de todo el proceso al hacerlo por fases.
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