Cómo descubrir las fortalezas de tu equipo

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  • admin
  • Abr 15, 2021

Los empleados de una empresa son los verdaderos motores que pueden hacer que sea todo un éxito o no. Son las personas las que al final representan a la empresa, sus valores y su marca por lo que es muy importante tener un buen equipo de trabajo en el que se identifiquen muy bien las fortalezas de cada uno para potenciarlas. Conseguir eso y, además, reforzarlo con la colaboración y el trabajo en equipo, son las claves para llegar al éxito y a la consecución de los objetivos marcados.
Un buen CEO, Chief Executive Officer o lo que es lo mismo Director Ejecutivo, tiene que ser capaz de potenciar las habilidades de su equipo humano y de mantener a sus empleados motivados, ilusionados y comprometidos con la empresa. Es una labor complicada pero a la que hay que destinarle recursos y tiempo porque puede aportar grandes resultados y hacer que una empresa crezca exponencialmente en un ambiente sano. Dentro de las tareas del CEO, además de definir los valores y las estrategias a seguir y de asegurarse de que hay suficiente capital en la compañía, tiene que conseguir retener el mejor talento para la organización y sacarle el máximo partido.


Pero, ¿cómo se pueden descubrir las fortalezas de un equipo?
Vamos a ver varias claves que os pueden ayudar:
1. Pedir feedback y escuchar ideas: hay que fomentar que todo el equipo participe en la aportación de ideas y que nadie tenga vergüenza de decir lo que piensa. Para ello, si de inicio la gente no habla, se puede pedir feedback sobre una idea y empezar así un debate que lleve a un brainstorming, lluvia de ideas, y escuchar y analizar la aportación de cada uno. De este proceso, se puede sacar mucho sobre la personalidad de las personas (si son creativas, analíticas, individualistas, más colaborativas...). Además, permite también que todos los miembros de tu equipo se sientan valorados y fomenta el sentimiento de pertenencia al grupo.
2. Estudiar a cada persona: tomarse el tiempo de analizar a las personas es algo que puede aportarte muchas respuestas. Saber qué experiencia laboral tiene, sus costumbres (por ejemplo si le gusta ponerse música para trabajar), cuáles son sus habilidades sociales, si es un RP, “Relaciones públicas”, o no, si es una persona a la que le gusta la tecnología, la creatividad, la innovación o no... Todos estos aspectos ayudan mucho a definir a una persona y saber en qué ámbito de trabajo se siente más cómoda. 
3. Organizar una actividad team building: muchos pueden pensar que un team building es solo un juego con el que pasárselo bien pero no es así. De un team building se pueden sacar muchísimas conclusiones sobre las personas. Con las actividades de team building trabajamos, de forma lúdica, habilidades necesarias en toda organización. Al salir de la oficina y de la rutina diaria de trabajo, los participantes se suelen olvidar de que es una jornada más de trabajo y se muestran tal y como son. Es en esas situaciones en las que se puede ver de verdad cómo son las personas y cuáles son sus fortalezas y debilidades. Muchas veces, al becario, por ejemplo, le da vergüenza dar una idea en la oficina, pero, cuando participa en una actividad team building, se siente en igualdad de condiciones y se muestra tal y como es.
4. Asignar tareas y observar: otra de las cosas que se pueden hacer es asignar diferentes tareas a una misma persona y ver cuál se le ha dado mejor, cuál ha tardado menos en realizar, con cuál ha disfrutado más...
5. Ofrecer programas de formación y ver los intereses de cada uno: a través de los programas de formación también se puede aprender mucho de los intereses de los empleados, además, fomentas su motivación ya que les estás permitiendo que crezcan personal y profesionalmente y estás reforzando sus habilidades para que luego se vea reflejado en el desempeño de sus tareas.
Las personas son lo más importante de una organización y, por eso, saber detectar las fortalezas y debilidades de los miembros de cada equipo de trabajo es algo importante si se quiere destacar en el mercado y tener un valor diferencial frente a la competencia.